jueves, febrero 08, 2018




De hace unos años para acá, he notado que me había sumido en una actitud obsesiva compulsiva; porque tenía que andar checando a cada rato que estuviesen cerradas  -- y a sabiendas que ya lo había hecho antes-- las llaves de agua, la estufa y las entradas de mi casa, era algo que me frustraba y desgastaba enormemente porque empezaba a desconfiar de mi capacidad de mental. Por tal motivo me despertaba en la madrugada con ese pensamiento, y tenía que pararme para volver a checar algo que de antemano ya sabía, porque ya lo había checado dos veces antes de dormir.


La pasada vez pasada me desperté en la madrugada como muchas veces antes a pasado, pero curiosamente ya no  lo hice con la sensación de ansiedad, no, simplemente en mi cerebro se entablo un monologo:


Actitud Obsesiva Compulsiva de mi Cerebro:  Ángello  ¿ya checaste que todo esté cerrado?.


Yo: si guey ya dos veces.


AOCC: ¿ Y no te dan ganas de pararte para que lo vuelvas a checar de nuevo?


Yo: no guey tengo mucho sueño y estoy bastante seguro que todo está cerrado.


AOCC: si, pero tienes que pararte para volver a hacerlo.


Yo: no guey, ya no, ya lo revise y me caga que me estés despertando cada noche con la misma pinche cantaleta.


AOCC: ¿ y no te da miedo que el agua se esté tirando, que el gas se esté fugando o que se vallan a meter a robar?


Yo: pues sí, pero no creo que mi mamá tenga  demencia senil como para dejar abierto todo, y yo no soy un estúpido como para olvidar  hacerlo, y si de cualquier manera se van a meter a robar a la casa, lo van a hacer aunque todas las puertas estén cerradas, y eso ya no depende de mí.


AOCC: ándale Ángello, por los viejos tiempos.


Yo: no guey vete  a la mierda.

Y santo remedio; desde esa vez ya no siento la compulsión de revisarlo  todo tres veces, ya no me despierto en la madrugada con ese afán, me despierto única y exclusivamente para orinar y vuelvo a los bellos brazos de mi cama a seguir durmiendo.


En fin, no sé qué paso o porque, pero ahora me siento más tranquilo y no solamente sucedió con las cuestiones domésticas; también  volvió ese Ángello  valeverguista que ya no se angustia por las situaciones que no puede controlar; y es una bendición porque lo extrañaba tanto…

1 comentario:

Jova dijo...

Bienvenido, seguro que este Angello es mucho mas feliz y gracias por el consejo, eso le dire a mi AOC. Saludos