lunes, enero 28, 2008

OTRO CUENTO DE ESPARTACO

La noche era estupenda para salir de antro, era quincena y casualmente viernes, ya ataviado con ropa muy “in” salio de su casa y subió a su auto, trato de encenderlo, pero no arrancaba, lo intento hasta que la batería empezó a bajarse, ya estaba retrasado como media hora, había quedado de pasar por Luisa a las 9:30 de la noche, así que decidió tomar un taxi y desde el mismo marco al celular de su amiga para avisarle que llegaría tarde,no contestaba y lo mando al buzón de voz, no le pareció raro porque Luisa siempre dejaba el celular por todas partes, --es tan despistada—pensó.

Dejo pasar 8 minutos y volvió a marcar, pero antes de que se sonara el tono de “llamado”, escucho un chirriar de llantas, sintió un golpazo y el tronido de algunos huesos, el pensó que eran sus vértebras sucumbiendo ante el impacto de no sabia que.

Después nada, abrió los ojos, vio una luz muy brillante, pero no quiso ir hacia ella, sentía que el cuerpo se le desasía en mil partes, y ninguna embonaba con ninguna, veía a mucha gente a su alrededor, corrían de un lado a otro, enfundados en trajes verdiamarelos, vio el rostro de lo que el pensó que era ángel femenino, era bellísima, y supo que no estaba muerto, porque le habian enseñado en el catecismo que los ángeles son asexuales, después escucho una voz femenina que le preguntaba su nombre, donde le dolía y que si sentía las piernas, después volvió a perder el sentido.

Despertó, la luz de día que se traslapaba por las cortinas del cuarto de hospital hirió momentáneamente sus ojos, tuvo que esperar alrededor de 45 minutos para que sus ojos se acostumbraran a la luminosidad de ese día de junio, no sentía ningún dolor, de hecho, pareciera que no tuvo accidente alguno(aunque lo recordaba), pero después de pensárselo bien, noto una molestia en la garganta y al tratar de tocarse la boca, sintió una zonda que salía de de ella, instintivamente se la quiso arrancar, pero le dolió mucho, y al hacerlo se desconecto un censor que tenia en la muñeca, cosa que noto una enfermera en el monitor de la recepción del piso 8 donde el estaba internando, e inmediatamente llego y trato de calmarlo, el le decía que por favor se la quitara, que lo lastimaba mucho, la enfermera inmediatamente localizo al doctor que le estaba dando seguimiento a su caso, este llego muy pronto, le quitaron la sonda, e inmediatamente le hicieron un chequeo general, todo estaba bien, solo que las piernas estaban algo atrofiadas porque había estado en coma5 años.

Después de los 6 primeros meses de haber “caído” en el coma, su familia se junto a decidir si lo desconectaban o no, sus dos hermanos, mas chicos opinaban que si, pero solo la esperanza de su madre y la pequeña fortuna que le había heredado su abuelo (quien murió dos años después que el) lo mantuvieron atado este mundo, después, tras la muerte de su madre, fue solo la piedad de su hermano mayor, quien lo mantuvo “vivo”, el corría con los gastos.

Despertó un 16 de Junio, y era el cumpleaños de 1.5 millones de personas, pero ninguna que el conociera, el doctor ya le había retirado la sonda por la cual lo habian alimentado y ya le había advertido de que sus piernas no lo soportarían, también lo había dotado de un par de muletas, nadie conocido de su infancia estaba a su lado, la enfermera y el doctor eran los únicos seres humanos que había conocido hacia 1 hora, realmente era como haber nacido de nuevo, solo que mas grande y con la capacidad de reproducción inmediata(cosa que no había perdido en el accidente), sus hermanos ya venían a verlo, era cosa de esperarlos una hora, pero en ese inter de tiempo solo deseó hablarle a Luisa, pero no sabia a cual numero, --5 años en coma--, pensó, y de echo aunque el creía que lo estaban embromando, no fue así cuando salio al patio del hospital que precisamente daba a el estacionamiento y vio muchos autos con formas desconocidas ,para el , -- 5 años muerto, o dormido, 5 años que no viví--, seguía pensando mientras dejaba caer un teléfono inalámbrico que le habian prestado en la recepción del hospital, para marcarle a alguien que el aun se pudiera acordar, y solo faltaban 20 minutos para que sus hermanos llegaran a verlo, solo le basto 90 segundos para caminar hacia la calle y aventarse como pudo a las ruedas de un camión que pasaba por ahí, de cualquier modo, no podía ponerse al corriente de todos los cambios que habian ocurrido en el mundo.

Cuando las llantas del camión estaban a 2 centímetros de aplastar su cerebro el sonrió, creanme, el realmente fue feliz, sonrió, de cualquier forma el ya había muerto, hacia 5 años tras.

Espartaco.