Inmediatamente, tras la muerte de mi padre y después de
haber vivido muchos años en la segunda planta de mi casa, volví al que fuera mi
cuarto en la planta baja, la razón fue para que mi mamá no durmiera sola.
Es curioso estar aquí solo, recordando que fue en este
cuarto donde tuve mi primera relación sexual con la que fue la primera mujer
que ame en mi vida.
Hace como 31 años, cuando por fin hubo la manera de agrandar
la casa, mi papá uso el espacio que ocupaba un pasillo que pasaba por toda la
parte trasera de la propiedad y así se pudieron agrandar tres cuartos y construir
dos baños. Y precisamente por ocupar todo el perímetro trasero de mi casa, se quitó
mucha ventilación e iluminación natural de los cuartos que se agrandaron, motivo
por el cual, al cuarto donde dormía, se le robo casi dos metros cuadrados para
un cubo (donde alguna vez se fantaseo con construir una acuario) por donde
entrara la luz y el aire; con el tiempo pude mandar a tumbar dos de las paredes que lo formaban, poner
techo y recupere ese enorme espacio.
Hoy hace un mes que falleció mi papá y aun siento esa opresión
en el pecho sobretodo porque este cuarto lo ocupaba mi papá como oficina y
pasaba mucho tiempo aquí.
Mi mamá sigue adelante, no le permito que se achicopale, por
la misma razón ella sigue con sus ventas y cobranzas que para ella es una
manera de mantener su mente ocupada en otra cosa.
Por mi parte ahí la llevo, entre recuerdos y trabajo, yo si pienso
muchísimo en él, a veces me imagino que me va
a gritar cuando llego con unas chelas del súper siete: ¿ya estás de
borracho Miguel?, jajajaja. Otras veces por costumbre le grito: ¿no va a comer
paaaa?.
Ahora hay mucho silencio en la casa, me paso mucho tiempo
solo, mi madre va y viene todo el santo día, pero supongo que así estamos bien
por lo pronto. Ella tiene la idea de rentar los dos cuartos de arriba y yo no
le digo nada, es su casa y si ella piensa que es una entrada de dinero extra,
pues yo no la contradigo, con el tiempo vendrán otras cosas y otras
situaciones.