viernes, noviembre 01, 2013

QUE PINCHE SUEÑITO....

Ayer por la tarde noche me hablo un buen amigo dizque para ir a pedir “jalowin” (que era la excusa perfecta para irnos a agarrar el pedo a casa de una amiga), pero como yo estaba más interesado en el maratón de películas mexicanas de mello y aparte mi padre ha andado medio malín, le dije que nanay, -- che culo--, me dijo y colgó.


Y bueno, no hubo nada que lamentar con respecto a mi señor padre, y pues me la pase encerrado en mi cuarto desde las siete de la noche (pero me prepare con golosinas varias y una pepsi light de dos litros y medio), vi “el ataúd del vampiro”, “hasta el viento tiene miedo”, “mas oscuro que la noche”, y como dos películas mas de zombies en los canales de cable.


Yo creo que apague la tele como a las cuatro de la mañana más o menos, pero lo interesante es que tuve un sueño bien pinche raro verán:



Soñé que andaba en mi amado Coatzacoalcos, pero al parecer la prostitución y la delincuencia se habían apoderado de mi lindo terruño; yo andaba caminando por el centro y veía la decadencia en la que se había sumido mi amado puerto. De repente reconozco a un amigo de los que deje aya y me invita a echarnos unas cheves a un antro, entre con el y caminamos a una mesa donde estaban sentados varios de mis amigos que conocí haya todo era una ruidosa alegría, el tintineo de los tarros al brindar por mi llegada no cesaban, curiosamente yo estaba pidiendo agua Perrier (que para serles sincero en mi vida no la he probado, yo soy de agua de la llave, jajajaja).


Entonces todo era una algarabía moderada, no pasada de alcohol y de uno que otro fugaz churro de mota; de pronto unas notas melancólicas de una guitarra me llamaron la atención e hicieron que volteara hacia el fondo del local, entre el humo del tabaco y de los porros, a duras penas se podían distinguir cinco siluetas, seguía en la charla con los amigos, en las risas y en los recuerdos, pero algo me hacia voltear hacia el fondo del local constantemente.


Y en una de esas volteadas, pude distinguir que una de las siluetas me llamaba, pero no estaba seguro de que fuera a mí  y la ignoraba, volvía a voltear y seguía viendo como me llamaban con la mano, así que decidí ir a ver si era a mi, cuando llegue se trataba de una amiga que, obviamente, también tenia mucho de no ver, pero a las otra cuatro personas no la conocía, saludo a mi amiga y me dice: --mira Miguel, te voy a presentar a mis amigos: ellos son Don Mario y Doña Teresa, ellos son padres de Mario (el que estaba tocando la guitarra) y de Rosaura (que estaba sentada a lado de su hermano Mario)--, --Mucho gusto,--comente, -- ven miguel siéntate a mi lado me dijo Rosaura--.


Rosaura era una bellísima mujer, tenía alrededor de  veintidós y veinticinco años, me senté a su lado, me ofreció algo de beber, le dije que no (tenia mi botella de Perrier), a continuación le pidió a Mario que tocara una música alegre porque quería bailar conmigo, yo medio sacado de onda acepte, no sin antes voltear a ver sus padres y pedirles permiso, sus padres aceptaron ,Mario empezó a Tocar; y mientras bailábamos me di cuenta de la extraordinaria belleza de Rosaura, de su cuerpo perfecto y de que era invidente, sus ojos eran como tornasol, entre azules y verdes. Ella me pregunto si podia tocarme la cara para saber como era, le dije que si, empezó a tocarme el rostro y me dijo: Eres perfecto; seguimos bailando dos piezas más, pero sus movimientos, al principio normales, se convirtieron en algo eróticos y lascivos, por pena me separaba de ella, pero ella se arrejuntaba mas a mi, no le importaba que sus padres y hermano estuvieran presentes.


Entonces dijo: -- me voy a mi casa con Miguel--, sus padres no objetaron nada.


Salimos del antro e inmediatamente un Cadillac negro antiguo se detuvo en la entrada y un chofer de aspecto “me da culito”, nos abrió las puertas suicidas del carro, el chofer condujo por todo el centro y nos dirigimos hacia la salida de la ciudad; llegamos a una mansión antigua y enorme, pero no tenia un aspecto tenebroso, al contrario se parecería mucho a la mansión de la película de “The Great Gatsby”. El chofer se fue por donde vino, ella me dijo que  estábamos completamente solos ,  me dijo que se iría a poner cómoda, y que yo podia hacer lo mismo o servirme un trago en el bar; el bar estaba rodeado por una alberca ovalada, solo una rampa de concreto unía el bar con la plazoleta que rodeaba la alberca.


Llego con un traje de baño muy sexy y se metió a la alberca, me dijo que me metiera con ella, le dije que no traía  ropa interior, entonces ella se quito el traje de baño y me dijo que ya estábamos iguales, entonces me metí y nos empezamos a toquetear, ella seguía diciendo que yo era perfecto mientras tocaba mi cuerpo (todas su partes), yo le pregunte que porque decía eso, y en cuantito la penetre, sus ojos antes hermosos tornasolados entre azul y verde, se convirtieron en dos ascuas encendidas , su cuerpo empezó a crecer y se transformaba en una masa viscosa, negra y con cientos de tentáculos, su rostro antes bellísimo cambio y se convirtió en una especie de mascara con la nariz enorme y  sus labios desaparecieron y en su lugar broto una vagina peluda, peluda, peluda. Y ya cuando estaba apunto de que me diera un paro cardiaco me dijo: --eres perfecto porque eres igual que yo—y madres, que me convierto en un ser con cabeza de macho cabrio y un cuerpo entre león y rinoceronte, no mamar!!! Me veo y empiezo a gritar, y me dice: -- no te asuste Miguel, desde que naciste siempre has sido esto, somos los últimos demonios ancestrales que quedamos en el mundo-


Y pos bueno, con el miedo que me dio el convertirme, ya ni cogimos ni me acabe el agua
Perrier, y que me despierto.


Para la otra le hago caso a mi compadre y me voy a agarrar el pedo con el, snif….