viernes, agosto 10, 2007

THE SIX MILLION DOLLAR MAN



Me acuerdo la primera vez que me acorde de haber ido a ver una película al cine, y aun no sabia hablar ingles (y aun no se) pero hoy se mas que antes, el titulo jamás se me olvido: “the six million dollar man” o sea: el hombre de los seis millones de dólares, o sea la película de la serie de TV. del “hombre nuclear”, que la protagonizo Lee Majors, tambien recuerdo el nombre del cine: Real Cinema, y no mamar, realmente todo era real, desde las alfombras rojas que hacían antesala en el lobby del cine, hasta las confituras, palomitas , sabritas, productos marinela y hot dogs que expendían en la dulcería del cine, hasta los acomodadores que aun llevaban el tipo atuendo rojo con borlas en las hombreras y los botones dorados, y obviamente tambien la gorrita roja.

No mamar, antes ir al cine (cuando yo apenas tenia como 5 años), era una verdadera experiencia para recordar, fue cuando los cines pasaron de tener “gayola” y exhibir películas del Santo o de Neutron (con Wolf Rubiskin, si de esas que te pasaban de a tres por 5 varos) a bancas acojinadas de esas que se doblaban cuando estaban en sin usarse y alfombras rojas en los corredores, las cortinas rojas muy gruesas y con bordados en dorado, y el olor de las maquinas palomeras invitaban a tu estomago a consumirlas, y aun servían las cocas de los envases de vidrio al vaso, aun no había maquinas automáticas, que de repente se les termina el gas y saben bien gachas, jajajajaja.

Pero antes (en mis tiempos de niño) realmente era mágica toda aquella parafernalia, y de morro, la pantalla parecía gigantesca, y las imágenes salían de “algún dispositivo mágico”, la verdad me la pasaba mas tiempo tratando de adivinar desde donde salía esa luz blanquecina del proyector, que viendo la película, porque aun no comprendía el sistema de las maquinas proyectoras que usaban barras de tugsteno para proyectar los rollos de 8 Mm.

Pero creo que esa fue mi primera película que vi en un cine, y por cierto, esa vez me llevaron mi apa y mi ama, después llegaron muchísimas más: La Guerra de las galaxias, Superman, y la experiencia del cine ya no fue la misma, paso de ser del blanco y negro a technicolor, y con muchas explosiones y efectos visuales y todo, aun recuerdo el clásico sonido cuando el hombre nuclear saltaba: tucutucutucutucutucutucu. Jajajajaja. De ahí empecé a hacer cosas y cada vez que saltaba yo mismo le hacia el ruidito, jajaja, una vez me le quede viendo al foco como 20 minutos, porque pensaba que así se me haría la vista biónica, que pendejo.

Pero, lo único que extraño de esos tiempos, es precisamente eso, la expectación que te provocaba enterarte que te iban a llevar al cine en la noche cuando tu jefe llegara del jale, a veces mi señora madre hacia tortas de guevo con chorizo y las metía de contrabando en su bolsa, Jajajajjaa, claro que ya viendo la película, el interior se llenaba de todos los olores a comida posibles, porque mi jeja no era la única que metía contrabando

Ahora no es lo mismo, voy al cine casi mecánicamente y muy esporádicamente, a veces voy aunque no estén pasando nada bueno, y solo por el simple hecho de que no hay nada mejor que hacer, a veces, cuando tenia novia, lo hacia porque no quería hablar con ella, pero era gacho no verla y aparte quería estar conmadre en el clima, porque han de saber que estando en el clima existe una muy baja disposición a discutir.

Saludos.