martes, agosto 09, 2011

Jajajaja, no mamar!!!!!!, me da reti harta penita contarles esto, pero pos como son bien pinche chismoso con las cosas graciosas que me pasan, pos se los voy a platicar(no si antes ocultar el rubor de mis hermosas mejillas con el rebozo).

Resulta que ayer estaba tirando gueva, rascándome los peludos, hermosos y magníficos guevotes que tengo, cuando empieza el programa de Aquiles (el chef bigotón que sale en el canal de utilísima), y que me da hambre, para esto ya eran como las ocho de la noche. Bajo a la cocina, y checo lo que había en el refri, me doy cuenta de que solo había sobras de comida y no se me antojo nadita, me fijo en el compartimiento de las legumbres y veo un bonito chile morrón, unas papitas de galeana y unos champiñones deshidratados, en mi mente empecé a imaginar un magnifico omelet con todos estos ingredientes.

Pelo las cuatro papitas de galeana ( antes las había hervido), pongo en agua los champiñones y pico en cubitos el chile morrón, saco tres huevos (tenia mucha hambre), también pique un chile serrano, tres tomates cherry´s y puse a freír el tocino.

Total que, ya se estaba cocinando el rico omelet, el olor empezó hacerme salivar, chingao, parecía perro de rancho en plena boda. Cuando de pronto sucedió……

Una tremenda explosión cimbro toda la cocina, volaron las cazuelas que tenia sobre la estufa, los vidrios de la ventana explotaron, y la puerta del horno se abrió de madrazo, neta que si no estuviera gordo, me hubiera convertido en eunuco , jajajajajajaja.

Todo ocurrió en un segundo, los vecinos salieron a la calle a ver que había sucedido, y pues obviamente la cocina se lleno de humo y del olor nauseabundo de la fibra de vidrio chamuscada, de suerte, ni el aceite caliente, ni el agua hirviendo me quemaron , y también por suerte no había nadie mas en la cocina.

Lo lamentable del caso fue que el delicioso omelet quedo pegado en el techo, jajajajaja.

¿Y porque sucedió todo?, porque el pendejo de yo, primero pensé en hacer el omelet en el horno, pero como tenia mucha hambre, pues lo mas rápido era prepararlo en un sartén, y nunca cerré la llave de gas del horno, Snif…

Chingao, en todo el tiempo que llevo cocinando, solo me había quemado, pero nunca me había sucedido algo como esto, dejen ustedes el madrazo que me dio la puerta del horno, mi orgullo es el que salio mas lastimado, Snif… ahh, también me queme los pelos del brazo, Snif.