sábado, abril 28, 2007

CUATRO BOTES Y UN FUNERAL

Por alguna extraña razón toda la semana sentí la necesidad de hablar con un viejo amigo de la prepa que tiene años que no veia ni hablaba con el, y ayer, viernes por la noche, me puse a revolver mis papeles viejos donde sabia que había visto una agenda donde tenia apuntado su numero telefónico, total que no la encontraba, y en eso llego otro amigo a echarse unas chelas a mi casa, fuimos por unas tecates y nos pusimos a quemar unos discos y a agarrar la jarra, entonces a mi amigo le habla su esposa por el radio y se hacen de palabras, cuelga, y me dice mi cuate:-- chale guey, en todo el pinche día mi vieja no me hablo para nada al jale, y nomas me estoy echando unas chelas y ya esta chingue y chingue, hasta parece que tienen radar--, ni pedo, se acaba la chela y se larga.

Yo me quede en la micro acabando de bajar unas rolas, y quemando unos discos que ya le había prometido a mi camarada tenérselos para hoy, total que pasaba el tiempo y la cheve seguia desfilando por mi garganta -como un alegre carnaval de felicidad liquida-, en eso me acuerdo que tenia otra caja con papeles viejos en el que fue mi cuarto, y que mi señora madre tomo por asalto para guardar triques, voy y le pregunto que si no había visto una caja así y asa la ultima vez que movió las cosas de ese cuarto, para mi grata sorpresa me dice que si, va y me la trae.

Total que me pongo a revolver los papeles con una alegría renovada, y órale, ahí estaba la dichosa agenda que andaba busque y busque como loco, me fije en la hora para saber si no era tan tarde, eran las 11:15, y pensé que no era muy tarde para llamar y lo hice, me contesto la voz de una mujer y le dije: --hola, mi nombres es Miguel Ángel y soy amigo de Ricardo, estudiamos en la misma prepa,¿estará por ahí?--, entonces la chava me dice que ella es su hermana, pero que Ricardo había fallecido el miércoles pasado(de esta semana) en un accidente en la carretera a Montemorelos, N.L., chingado, le di el pésame y me deshice en disculpas por haberla molestado en una situación tan difícil, me dijo que no me preocupara y que me agradecia el pésame y tambien el echo de haberme acordado de su hermano.

Colgué el teléfono, y se me vinieron miles de recuerdos de ese amigo, realmente me entristecí mucho, realmente si lo apreciaba bastante, pero por cosas de la vida y de trabajo nuestros caminos se separaron, aunque pude recordar nuestra ultima charla por teléfono, eso fue hace como 6 años, ese día nos pusimos de acuerdo para juntarnos y darle gusto al dedo abriendo Tecates, cosa que no hicimos, ya ni me acuerdo porque.

Y bueno, tambien me quede pensando en que ¿si toda la semana tuve ganas de hablarle, porque no lo hice el lunes o el martes?, pero bueno, supongo que esas son cosas de la vida, al abrir la hielera para agarrar otro bote de Tecate, vi que solo quedaban 4, y entonces me vino la morbosa analogía del nombre de la película de “cuatro bodas y un funeral”, pero en este caso eran “cuatro botes y un funeral”, sonreí, pero no por malicia, quizás fue por tristeza, o por quien sabe que diablos , pero de alguna manera sentí como que me estaba echando esos botes prometidos con el amigo que ya se había desdibujado de este mundo.

Saludos raza.