jueves, mayo 06, 2010

CUANDO YO ME MUERA......

Cuando yo me muera, y deseo que no sea pronto, quiero morirme de cara a un cielo estrellado, quizás la muerte, en los últimos minutos que tarde la traslación de un plano a otro, me de la sabiduría que tantas noches de llanto he necesitado.



Cuando yo me muera, y deseo que no sea pronto, no me gustaría que toda mi vida pase como una película de cosas tistes , así como cuentan los que han regresado de un coma, no me gustaría, mi vida pasada ya la conozco y los errores que cometí ya los disculpe y entendí. Más bien quiero que por mis moribundos ojos solo pasen las imágenes de los días en que fui feliz: como cuando tuve mi primer perro, mi primer triunfo al ganar una pelea de niño, cuando vi caer por primera vez un rayo en el mar, mi primer beso, mi primer amor, mi primer rifle de postas, mi primer par de patines, y hasta porque no, mi primera decepción amorosa.



Cuando yo me muera, y deseo que no sea pronto, no me gustaría que mis amigos lloraran, yo casi nunca llore con ellos, mas bien mi estancia en esta vida y con este cuerpo, fue feliz y lleno de tantas cosas y tantos momentos de alegría, tantas vivencias juntos: caras tontas, trasnochadas sabias y discusiones que nunca nos llevaron a ningún lado, pero que fueron oportunas en su momento y también muy divertidas.



Cuando yo me muera, y deseo que no sea pronto, no me gustaría ver llorar a mi familia, yo he sido un pilar muy importante para ellos, quizás y el menor de los pilares, pero si uno muy importante, y ver llorar a mis padres y hermanos me mataría dos veces. Cuando fui un niño, fui un niño muy querido, mis hermanos me protegieron de todo mal, mi mamá me cantaba:”duerme mi niño, duerme, mira al mar que las olas vienen y traen regalos, duerme mi niño duerme” mientras me mecía en una hamaca y yo dormía y la miraba, y el sueño poco a poco llegaba a mi.



Cuando yo me muera, y deseo que no sea pronto, me gustaría hacerlo a lado de una mujer que yo haya hecho muy feliz, a lado de una mujer a quien amé, cuidé y respeté, a lado de una mujer que me amo, cuido y respeto, me gustaría que el lecho de mi muerte, estuviera rodeado de mis hijos, que con la frente en alto y sin asomo de tristeza digan: mi padre es el que esta tendido ahora, esta muerto, pero, el nos dio y nos amo hasta el ultimo día de su vida, vida que el vivió plenamente y por eso no lloramos.

Angello.