LAS FIESTAS DE LA RAZA DE LA UNI

Resulta que cuando era estudiante en la UNI, siempre trataba de juntar a la raza de mi salón para organizar pachangas, ya ven que no todo en la vida es estar de matadito estudiando.


Y créanme que tenía mucho poder de convocatoria, y tan era así, que me tocaba convencer a las esposas de los compañeros casados para que los dejaran ir, jajajajjajaja. Y para mí era tan natural organizarlas, que hasta me daba chanza de organizar otra fiesta alterna, el mismo día y a la misma hora, pero con la raza de la Logia(obviamente en lugares y municipios diferentes) y por la misma razón, no iba a la fiesta de los compañeros de la universidad, jejejeje, pero pues no se podían quejar, porque ya les había organizado desde la coperacha , compraba todo lo necesario para el fiestón, y muy temprano le llevaba todas las viandas, alcoholes y sodas a la casa donde se iba a llevar a cabo dicha peda, yo prometía regresar cambiado pero naaaa, Jajajaja, prefería quedarme en la otra fiesta con los amigos de la Logia.


Fueron como cinco fiestas que les organice a los del salón, mismas que nunca asistí, claro que al siguiente día de clases, pues no se hacía esperar el abucheo, la pamba loca, las patadas en el trasero, y el enojo de las compañeras, mis argumentos eran: ¿pues qué no se la pasaron bien chingon?, ¿a poco no estuvieron a toda madre los frijoles a la charra que les hice?, ¿ que la carne que les compre no estaba suavecita?,¿ y no me van a decir que los casettes que les grabe no estaban bien matones?-- no, pues si Àngello, todo estuvo a todo dar, ¿pero porque chingados no fuiste?--, Jajajaja, yo siempre salía con una barra diferente pero muy creíble para cada ocasión.


Total que bueno, antes de graduarnos pensamos en organizar una mega-súper fiestona loca para celebrar solo los del salón, porque ya se venía la graduación encima y pues faltando casi una semana para la misma, pues casi no teníamos tiempo para organizar la fiesta del salón, así que como un “ungido” por los dioses, me ofrecí a organizarla, incluso propuse rentar un pequeño salón de fiestas para hacerla ahí, claro que la raza se puso arisca al aceptar mi oferta, pero les prometí como caballero que soy, que esta vez sí asistiría (además que casi todos estaban ocupadísimos en rentar sus respectivos trajes y vestidos de fiesta), así que no tuvieron más opción que dejarse tentar—una vez más-- por el demonio Àngello.


Total que me moví muy rápido, busque un lugar que se encontrara en un sitio estratégico, para que no se les hiciera lejos a la mayoría de mis compañeritos de clases, el salón lo conseguí con un amigo que por aquellos ayeres rentaba una casa en el barrio antiguo que había habilitado como bar, y que a veces usábamos para hacer pedas y otras para que el practicara con su banda de rock en español, creo que la banda se llamaba “TERLENKA” o algo así, incluso conseguí a muy buen precio para que dicha banda amenizara el convivio, y hasta logre que me dejaran meter 8 cartones para la raza de mi salón, y si se acababan , pues hasta les conseguí buen precio para la cheve, por ejemplo: si por aquella época la cheve costaba en el bar 10 pesos, logre mediante exhaustivas negociaciones (que consistió en invitarle el pedo a mi compa, rogarle y lloriquear) que se las bajaran a 6 o algo así, el pedo era que si estaba muy barata.


Y bueno, la neta si tenía planeado ir a esa peda con la rasita del salón, pero dos días antes me dijo mi compadre Júpiter que le había hablado el Chilango(un muy buen amigo que se había ido a hacer un doctorado en economía a Inglaterra) y que venía a Monterrey precisamente ese día, no mamarrrr!!!, ahí si me entro cruda moral, pero pues hay de amigos a amigos, y el chilango es un gran amigo, así que tome una decisión.


Tres días antes les entregue las invitaciones a los compañeros del salón, mismas que yo había diseñado e impreso, con todo y croquis incluido, la verdad me quedaron muy monas, y hasta una foto grupal (que les había tomado como dos días antes) imprimí como fondo, ¡¡¡ no, no, no, una verdadera chulada de invitación!!!, Pero no asistí, la verdad me pudo más los dos años que tenia sin ver al chilango y con el dolor de mi corazón decidí no ir a la fiesta de la raza del salón.


Jejejejejeje, pero ahí no acabo la cosa, el oso más grande de mi vida lo pase cuando andábamos en el Gigante de Cigarrera, comprando la carne y la chelas, cuando de repente en las cajas me encontré a dos amigas y tres amigos del salón, habían ido a comprar botana y me ven, jajajajajajajajaja, y la cabrona de Esther me dice: -- que onda Àngello ¿no que no podías ir a la fiesta de nosotros porque hoy iban a operar del corazón a tu Tío?, jajajajajajajajajjaa, pero como siempre me he jactado de tener una mente sumamente ágil le conteste: si Esther, a mi tío lo acaban de operar hace 2 horas y todo salió muy bien, y por eso mis primos y yo decidimos hacer una carne asada para celebrar, jajajajajajajajajajaajajajajaja.


Obviamente no me creyeron, pero la semilla de la duda ya estaba sembrada, así que no les quedo más que tragársela, sin masticarla.


Afortunadamente si fui a la fiesta de graduación de la generación, y al parecer no hubo más resentimientos en mi contra, porque todos acabamos en la alberca de la quinta de un amigo, bien pedotes, por cierto que ahí también hubo sorpresas, dos amigas (que ya andaban bien pedas) decidieron salir del closet y confesar que eran pareja, un amigo se declaro homosexual y ante el calor de tanta sinceridad, no me quedo más que decirles la verdad: que no fui a las fiestas que yo organizaba, porque sus pláticas se me hacía de lo mas idiotas y no aportaban en nada a mi creciente intelecto; supongo que ya todos andaban bien pedos porque en lugar de molestarse conmigo, se cagaron de risa y me dieron pamba loca en la alberca.


Y bueno, supongo que ellos tiene algo que agradecerme: yo les organizaba buenas reuniones y con mi in-asistencia, se libraron de un tipo de lo más mamon.


El mismísimo, buen organizador de pedas, y bastante mamon, Àngello.