HUBO UNA VEZ UNA NOCHE TRISTE

Una vez, hace mucho tiempo, mientras caminaba en medio de la noche, un viento violento y frió soplaba, arrancando hojas de los árboles y las venia a estrellar en mi cara, realmente no recuerdo de donde venia o hacia donde me dirigía , de pronto una llovizna se dejo caer desde las nubes que, como una capa siniestra me impedía ver las estrellas, me refugie bajo un árbol donde una banca casualmente parecía que me esperaba, me senté y encendí un cigarrillo, solo podía recordar el motivo de mi tristeza, pero ahora no viene al caso recordarlo.

en eso escuche un sollozo, y agudice el oído para determinar de donde venia, y otra vez el sollozo, por mas que trataba de averiguar de donde provenía no lo podía localizar, parecía que viniera de todas las direcciones: del norte, del sur, este y oeste, de arriba, de abajo, de dentro de mi, de cada piedra, de cada árbol y enredadera, de todas las partes hacia donde volteara, pero lo escuchaba muy cerca de mi, entonces pregunte: --¿quien eres?--, --soy la noche mas triste que hayas vivido--, una voz que no era humana me contesto, no se si realmente la escuchaba o solo en mi cabeza sonaba, --¿Por qué estas llorando?--, la volví a cuestionar, --lloro por ti, lloro por toda las demás personas que como tu se sienten tristes por mi culpa--, --pero yo no estoy triste por tu culpa, yo estoy triste por mi culpa, por mi estupidez, por mi manera de pensar, por todo eso estoy triste--, le conteste, --pero mírame bien, soy fea, y en el cielo no se asoma ninguna estrella para que me haga ver bonita, soy fría, soy violenta, y estoy llorando--, me contesto la noche, --no eres ninguna de las cosas que dices, siempre serás bella, solo que hoy eres diferente, hoy muestras otra de tus caras, eres compleja y despiadada, pero dentro de todo eso existes en la belleza, observa como el viento barre los árboles, mira como bailan los árboles, escucha como el viento te inventa una melodía cuando pasa entre las ramas y los huecos de las paredes, mira como la lluvia da vida a esas flores que el sol estaba marchitando, siente como nutres las tierra, ¿lo vez?, no eres fea, solo eres diferente--.

Entonces la lluvia arrecio, el viento se torno aun mas violento, y las hojas de los árboles cayeron por millares, el cielo se nublo mas y mas, y el sollozo ceso, en su lugar se escucho la melodía del viento pasando entre las ramas y por cada hueco de las pareces, y una dulce risa, que parecía que venia de todas las direcciones, del norte, del sur, del este y oeste, de arriba, de abajo, de dentro de mi, de cada piedra, de cada árbol y de cada enredadera, yo me marche, sin la tristeza que sentía en el alma, pero, ya no viene al caso recordarla.