miércoles, junio 27, 2018


¿QUE PENSARAN DE MÍ MIS PERRAS?

Invariablemente, todos los días me despierto más o menos entre 5:40 y 6 de la mañana; Salgo y alimento a mis dos perras Dachshunt (ya tienen ambas un año y días), le limpio sus tremendas cacotas y sus orines apestosicimos (no sé si lo escribo bien), pero bueno.

Trato siempre de tenerlas cerca de mi cuando estoy en la oficina, imprenta, taller, bar, lugar de tertulias,centro de cotillón,  confesionario y lugar del bardo impoluto. Porque casi siempre las dejo solas por mi trabajo.

Generalmente las saco a pasear en la noche, (por lo menos lo hago tres veces por semana) sé que debería de hacerlo más seguido, pero por mi inconmensurable  gueva;  --y ahora si, por mi andropausia--, pues ya me siento más cansado.

El punto de este blog, es que si bien no saco a mis perras a pasear como Dios manda, se me quedan viendo todo el día tras la malla de alambre donde las tengo relegadas. Y es ahí cuando pienso que si soy buen padre para ellas?...

Y no estoy diciendo que es un área pequeña, más bien es un área grande, pero como son dos perras hembras de más de un año, y entran en celo casí mismo tiempo y se tornan insoportables, snif.. (Estoy batallando más que con todas mis ex novias).

He leído por ahí que ellas me ven como el macho Alfa, pero no mamar, ches perras se ponen insoportables, pero a diferencia de mis ex novias, cuando se ponían así,  a ellas les daba una patada en el culo y a la verga,  pero ni pedo le haré eso a mis dos salchichas…

domingo, junio 24, 2018

miércoles, junio 06, 2018


Se marchó un viernes  por la mañana, cuando aún no se marchaban las nubes nubladas  negras de la madrugada; pero no quiero decirle que la extraño, aun no.

Antes de decirle que la extraño, preferiría decirle muchas otras cosas: que cogí, que baile, que viaje, que reí, que dormí, que me enamoré, que perdí, que viví, cosas que ella me pidió hacer cuando la conocí.

No quiero darle más poder…
Ella está muy bien sin mí, y yo,  estoy  a veces bien y a veces  mal sin ella.
Quiero decirle que  a veces que la sueño, y a veces no quiero decirle nada.
De igual manera no tengo comunicación con ella.

Ella tiene 25 años y yo ya paso de los 45…

Nos conocimos sin querer, sin saber y sin pensar, nos dimos bien duro y muy seguido.
Mi cama la extraña, su cerebro me extraña.

La extraño…

domingo, mayo 06, 2018




Y bueno, hace unas noches  tuve un sueño re-loco; Soñé que andaba con Tin Tan  en una cantina de Juárez.

Algunas cosas la recuerdo a color y otras en blanco y negro; Y bueno, ahí estábamos y de repente el pachucote la empieza a armar de lío porque  no le quería pagar a la fichera con la que estaba, a decir de el: la vieja solo se estaba haciendo pendeja y no estaba bailando.

Y pues que se arman los putazos, chingos de botellas volando, chingos de zapatos partiendo narices, y nosotros dos debajo de una mesa.

De repente como que se calmó la cosa, y yo jale a Tin Tan de un brazo y lo saque para afuera del congal.

Tin Tan me dio las gracias y me autografío el pañuelo que llevaba en su saco; me dijo que la próxima vez que yo  volviera a Cd. Juárez le recordara por teléfono para mandarme una limusina para recogerme en el aeropuerto, y yo recordé que no debería de estar fumando tan tarde esa mamada…


martes, abril 24, 2018

EL APOSTATA....


Antes de escribir el post de abajo, estaba haciendo fila en el súper siete, compre unos cigarros y una botella de salsa inglesa para aderezar las verduras que me estoy comiendo ahora) si, también me encanta revolver cigarros  con mis verduras…

Escuche una voz que me llamaba por mi nombre, volteo y era una amiga de la primaria donde estudie de quinto a sexto año, pero que extrañamente me la volví a encontrar hace algunos años en un taller literario que estaba en el barrio antiguo, al cual asistí solo por dos meses.

Me saludo muy efusivamente, me pregunto que ha sido de mi vida. La charla se tornó fluida, me comento que ella duro un año y medio en dicho taller literario (yo tenía un chingo de hambre y lo único que me interesaba era llegar y encajarle el diente a mis verduras asadas).

En un momento de la conversación me recrimino el haber abandonado el taller (modestia aparte yo aportaba cierto carácter humorístico y sarcástico, a decir de ella: un toque fresco con mis escritos).

Mi respuesta fue sincera: abandone el taller porque los trabajos que presentaban sus casi treinta y cinco miembros me parecía muy trillados,  sosos  y fusilados.   

--Ay si, ¿Cómo si tu hubieras nacido con el don de la escritura?--, me recrimino en un momento dado de la charla; Le dije que no, pero que si había leído varios libros de poesía antes de inscribirme en el taller.

Entonces me describió con una palabra y la uso de una manera apoteósica, grandilocuente, mamadora; Su boca se llenó con cada letra, con cada silaba,  sus cuerdas bocales vibraron con un raro frenesí al mencionarla (como si unos demonios previstos de sabiduría lingüística  las manejaran), seguramente la había aprendido hace unos años y se la estaba guardando para un momento especial (así como cuando compras una botella de champán y la guardas para descorcharla en el momento de cualquier celebración digna de abrirla).

Me dijo: eres un Apóstata, porque te sigo en tu blog y tu manera de escribir ha cambiado desde aquella vez.

Mierda, yo sabía perfectamente a que se refería, pero por pendejo y alcohólico, no podía recordar el significado de esa maldita palabreja; Tenia una vaga idea de lo que significaba, pero me encontraba perdido, arrinconado.

Lo único que atine  a decirle fue que la vida nos cambia, y con ello, nos cambia todo.

Jajajaja, ahora que estoy cenando y que ya busque lo que significa esa palabreja, tiene razón, pero yo también la tengo: la vida nos cambia y con ello, cambiamos todos…

Y bueno, lo que publique antes, fue porque con su charla me recordó a él buen “Espartaco”…

DEL POEMARIO PRIMORDIAL DE ESPARTACO...


Si porque de mis ojos rodó el llanto,
Al advertir la verdad de tu distancia,
Pensaras que un cobarde es el que te adora,
Y no aquel hombre que por ti forjo esperanza.

Te pregunto mujer si por fortuna:
¿Este llanto no lo piensas de impotencia?,
En vez de creerlo vasto de penurias,
O miedo a la soledad lo que me aterra.

Mas si por eso pensarás que soy cobarde,
De mi amor a nadie pongo por testigo,
Porque nadie entendería esto de amarte,
Y solo yo se lo que he perdido.

Si tus ojos ya no vuelven a los míos,
No me importa pues un tiempo fui de ellos,
Y si el amor que surgió lo crees perdido,
No me importa porque en mi alma yo lo llevo.

Solo una última cosa de ti quiero:
No pienses que soy o fui un cobarde,
Porque un hombre cuando calla no es por miedo,
Y aunque de ti quiera amor, hoy ya es muy tarde.

Veintitrés de febrero de mil novecientos noventa y cinco.

lunes, abril 23, 2018

SOLEDAD...






Te está esperando, mírala: es la soledad, corre a ella y observa sus   ojos hundidos y  húmedos por tantísimo llanto. Palpa su tristeza, bébete de golpe sus lágrimas, has tuyos sus lamentos y arquea tu cuerpo—danza al compás de los réquiems que están sonando en el tiempo de estar sola--.

Mira los seres y estares de otras vidas tristes, toma ejemplo de ellas y escóndete en un frió arcón; esconde tu rostro de los demás, practica rictus de dolor, inventa muecas de tristeza, que pronto  sonara la primea llamada para actuar en el escenario de un teatro abandonado.

Pero no llores ahora, no dilapes llanto,  más tarde te faltarán lágrimas, más tarde será tu nombre “Soledad”…

jueves, abril 19, 2018

SNIF, NO LO SABIA...


martes, marzo 20, 2018


El sábado pasado estaba bien “despreocupe” aquí en mi oficina, cantina, sala de relax, sala de situaciones, imprenta, sala de cotillón, bodega de mi mamá, etc. En fin, hacia un chingo de calor y como no tenía evento social en puerta, pues me compre unas lindas caguamitas (ya no tomo caguamones). Departiendo unilateralmente estaba -- como usualmente lo hago--, cuando me hablan.

Era un amigo que conozco desde que llegue a vivir acá a Monterrey, hace 36 años. El perdió movimiento de sus piernas hace como 18 años más o menos en un accidente automovilístico.
Me saluda y le invito un vaso de caguama, me dice que sí, lo ayudo a subir la rampa de la banqueta  y nos ponemos a beber como Dios manda.

Ya, bebiendo casi como tres horas y platicando de todo, poniéndonos al corriente de nuestras vidas (pese a que lo veo muy seguido, pues trabaja en Metrorrey) la verdad es que platicamos muy poco, solo nos saludamos y prometemos juntarnos “un día de estos”, supongo que el sábado fue ese día de estos.

Mmmmm, No sé porque le pregunte que si tuviera una máquina del tiempo, le gustaría regresar al día de su accidente y poder evitarlo?.

No se tardó ni medio segundo y me contesto que NO.
La verdad yo no estaba de humor sarcástico, simplemente mi pregunta fue muy honesta y necesitaba una respuesta igual.

--¿Manolo, si tuvieras una máquina del tiempo a tu disposición, te gustaría volver a la mañana de tu accidente y poder evitarlo?--

--No Miguel, la verdad es que cuando tenía el uso de mis piernas, mi vida era muy miserable, siempre vivía con el  miedo de no lograr los objetivos que me había propuesto con mi familia, con mis dos hijos, con mi esposa. Me divorcie de mi primer matrimonio cuando me sentía una piltrafa humana al dejarme derrotar por mi incapacidad. Después de que toque fondo, entendí mi incapacidad y re-direccione las capacidades que me quedaban  hacia otro lado, fui campeón de halterofilia para minusválidos en Nuevo León; juegue básquet boll (jamás lo practique cuando podía caminar), me re-encontré verdaderamente con el amor, ahora estoy casado por segunda vez con una linda mujer que me ama, me ayuda y me Respeta. Miguel, son cosas que jamás hubiera logrado sin que una tragedia me hubiera pasado. Y si, si anhelo esos días cuando caminaba, pero mis pasos me llevaban a los teibols, a las cantinas, hacia lugares que no valían la pena.

Sonó su celular, contesto y en menos de cinco minutos vinieron por el dos lindos niños y su esposa.
Creo que el minusválido soy yo…

viernes, marzo 02, 2018

Me he dado cuenta que cuando hace frió, los testigos de Jehová están menos interesados en mi salvación…

domingo, febrero 18, 2018

UYYYYY, ANDO ASI BIEN SABE COMO Y CON LANA,YA VALIO QUESO...



Hace rato estaba limpiando mi PC de datos innecesarios,  de archivos dañados  y de programas que ya no utilizo; me topé con muchas cosas y dentro de esas cosas, muchas fotografías  de personas que ya no están en este plano existencial y me pregunte ¿ Cómo estarán sus huesos?.


Pudiera ser un pensamiento morboso y enfermo, pero no es lo uno ni lo otro, desprendiéndose  de la idea de que en algún tiempo trabaje con cadáveres  y conviviendo muy de cerca con la “Catrina”.

No sé, a veces pienso en todas esas  personas --ahora muertas-- cuando convivían conmigo: en sus gestos faciales, manías y expresiones vocales. Me imagino el limo cubriendo sus huesos, a los gusanos comiéndose la carne de sus esqueletos, en el cabello duro en sus cráneos; pienso en todas las alegrías que pase en su compañía y ahora están mudas, inmóviles, completamente irreconocibles,  sirviendo de abono a este planeta.


Y es ahí cuando me imagino a mi cuerpo: encerrado en un ataúd, pudriéndose al discurrir del tiempo, imagino las cuencas de mis ojos vaciarse, todos los órganos de mi cuerpo descomponiéndose,  imagino mis huesos cubriéndose de limo,  alimentando a otras formas de vida y por fin, sirviendo de algo verdaderamente útil  a este planeta.

miércoles, febrero 14, 2018


--¿A dónde vas?-- , me pregunto mi madre al verme ir y venir del baño a mi cuarto, probándome chaquetas, sacos, sueters , pantalones, zapatos etc.

-- A encontrar al amor Ma — finalmente le conteste cuando encontré la combinación perfecta.

-- No vayas a llegar tarde hijo--

--No Ma, no te preocupes ya sé por dónde anda—

Como ya eran las nueve de la noche, no quise arriesgarme a algún desaguisado y decidí pedir un uber. Llego a la hora que tenía que llegar y pronto tomo rumbo al destino que le marcaba la pantalla del celular.

Legamos en 35 minutos, me baje y me dirigí a la entrada del pequeño bar que había visto en mi sueño recurrente: donde una voz me decía que tenía que estar a las 02:45 porque ahí encontraría al amor de mi vida.

En mi sueño  el bar se veía más alumbrado y no tan sombrío, pero ya eran tantas veces que no podía estar equivocado del lugar.

Escogí la mesa que creí estaba más alumbrada y no tan en la penumbra y como siempre, mi instinto de supervivencia tomo el control y me senté frente  a la puerta y con una pared a mis espaldas (cosas aprendidas de mi antigua vida).


Llego una mesera y me ofreció la carta de bebidas que ni siquiera  mire, le pregunte si tenía Anís del “Mono”, me dijo que sí,  le volví a preguntar que si era del “Mono”, hizo un mohín de fastidio levantando los ojos al cielo y de manera sarcástica me contesto:

--Si gusta le traigo la botella para que usted se cerciore— y desde ese momento  decidí que ni de pedo le iba  a dejar propina, me callo gorda.

-- Si por favor--; En mi vida solo he probado esa marca de Anís, pero cuando lo hice fue en una época que mucha paz le ha aportado a mi vida adulta.

Trajo la botella y una copa para Jerez, le pedí que la llenara al tope y que me trajera un vaso con agua con hielos, puso la sempiterna cartulina de la cuenta bajo el cenicero.

Saque un pitillo y antes de encenderlo, le di un trago al vaso de agua y un “besito a la copa de Anís”, después encendí el cigarro y le di una onda calada. Las 10:20 marcaba la hora en mi celular y me puse a inspeccionar visualmente el bar donde me había metido; una  cortina de humo de tabaco flotaba diáfana por todo el bar, note que a mi derecha, como a 6 metros había una puerta de cristal donde, por estar cerrada, amortizadas  se escuchaban unas  notas de un piano y una trompeta y música de orquesta, creí reconocer un Góspel de Ray Charles—que precisamente había escuchado en la película de Ray--; le pregunte a un mesero que pasaba junto a mi mesa que si podía entrar en esa habitación, me contesto que sí, pero que era una sala VIP y que el cober era de 250 pesos y un consumo mínimo de 200, le pase mi cuenta y le dije que quería estar ahí, le di un billete de 200 pesos para que “agilizara” mi cambio de estadía, aun eran las  10:45 y tenía tiempo de sobra para estar un momento escuchando buena música, total, no estaba consumiendo la cantidad de alcohol que normalmente consumo.

El cambio fue dramático, de estar  en una sala paupérrima y deprimente, pase a otra donde lo menos normal era estar sentado y consumiendo tu bebida, los demás estábamos parados y bailando – o intentando hacerlo—pero con las notas de un perfecto Góspel, interpretado por dos negros magistrales, uno cantaba casi igual que Ray Charles.

Empecé a pedir cerveza e invitarle gin tonic a una señora como de 49 años, que desde que empecé a bailar, ella bailo conmigo, sudamos, me tuve que quitar el saco y el sueter y me arremangue las mangas de la camisa azul plumbago que por fin decidí ponerme esa noche.
Bailamos no sé, como mil horas, la señora no me dejaba dar respiro y yo, aunque bien cansado (no estoy acostumbrado a bailar) pues tampoco me quería ver tan jotillo.

Hubo un momento en que bailamos calmadas y la señora se me arrejuntaba; ya con sus 49 años y desprovista ya de cualquier “ESTUPIDO ENAMORAMIENTO DE QUINCEAÑERA” (así me dijo), pues seguimos bailando, de rato me empezó a pagar las chelas , cenamos y para esto ya eran las 2:20 AM, y yo reaccione; di por terminada la velada, no sin antes invitarle el último yin tonic, me regrese a la zona fea de ese bar, y espere y espere y espere y espere y espere y espere y espere aún más y no pasó nada.

Me salí del bar como a las dos de la mañana, aunque bien bailado y medio jarras, pero decepcionado por mi sueño de encontrar a la mujer ideal.
Aun traía 800 pesos en mi cartera, pero como andaba depre, preferí caminar hacia una calle principal de monterrey, donde yo sabía que podía tomar un taxi, no quise pedir un uber porque realmente quería caminar y nada, los pinches taxis no pasaban o si pasaban venían llenos.

Di por terminado mi mundo de sueños y mi guarapeta, y le hable al uber, yo estaba en la calle de Carranza y padre mier, en eso me hace cambio de luces un carro, era la señora que bailo conmigo toda la noche, me dice que me andaba buscando por el área y  que  me suba y pues me subo.

Eso fue el domingo pasado y no habíamos salido de mi cuarto en tres días  hoy miércoles  la tuve que correr en la mañana, porque tengo trabajo en la imprenta.

Realmente yo esperaba una vieja de 40 a 43 años, pero la vida decidio…

No encontré a mi amor verdadero, como decía mi sueño, pero si encontré algo parecido…

domingo, febrero 11, 2018

Pues aprovechando que el día de hoy estuvo muy chingon, fui por la barbacoa y el menudazo, lave ropa de cama y mi ropa, bañe a las Kardashians (así les dicen mis amigos a mis perras) y ahorita echándome una chelita y estoy por darle mantenimiento a mi estéreo, feliz domingo para ustedes...


                                  Las "Kardashian" bien bañaditas y todas bien portadas ellas.






                                                            Y mi tarrito de cheve...

jueves, febrero 08, 2018




De hace unos años para acá, he notado que me había sumido en una actitud obsesiva compulsiva; porque tenía que andar checando a cada rato que estuviesen cerradas  -- y a sabiendas que ya lo había hecho antes-- las llaves de agua, la estufa y las entradas de mi casa, era algo que me frustraba y desgastaba enormemente porque empezaba a desconfiar de mi capacidad de mental. Por tal motivo me despertaba en la madrugada con ese pensamiento, y tenía que pararme para volver a checar algo que de antemano ya sabía, porque ya lo había checado dos veces antes de dormir.


La pasada vez pasada me desperté en la madrugada como muchas veces antes a pasado, pero curiosamente ya no  lo hice con la sensación de ansiedad, no, simplemente en mi cerebro se entablo un monologo:


Actitud Obsesiva Compulsiva de mi Cerebro:  Ángello  ¿ya checaste que todo esté cerrado?.


Yo: si guey ya dos veces.


AOCC: ¿ Y no te dan ganas de pararte para que lo vuelvas a checar de nuevo?


Yo: no guey tengo mucho sueño y estoy bastante seguro que todo está cerrado.


AOCC: si, pero tienes que pararte para volver a hacerlo.


Yo: no guey, ya no, ya lo revise y me caga que me estés despertando cada noche con la misma pinche cantaleta.


AOCC: ¿ y no te da miedo que el agua se esté tirando, que el gas se esté fugando o que se vallan a meter a robar?


Yo: pues sí, pero no creo que mi mamá tenga  demencia senil como para dejar abierto todo, y yo no soy un estúpido como para olvidar  hacerlo, y si de cualquier manera se van a meter a robar a la casa, lo van a hacer aunque todas las puertas estén cerradas, y eso ya no depende de mí.


AOCC: ándale Ángello, por los viejos tiempos.


Yo: no guey vete  a la mierda.

Y santo remedio; desde esa vez ya no siento la compulsión de revisarlo  todo tres veces, ya no me despierto en la madrugada con ese afán, me despierto única y exclusivamente para orinar y vuelvo a los bellos brazos de mi cama a seguir durmiendo.


En fin, no sé qué paso o porque, pero ahora me siento más tranquilo y no solamente sucedió con las cuestiones domésticas; también  volvió ese Ángello  valeverguista que ya no se angustia por las situaciones que no puede controlar; y es una bendición porque lo extrañaba tanto…

domingo, enero 21, 2018

lunes, enero 08, 2018

Pues después de tanto beber cerveza en estas fechas, hoy me dio por conectarme con mi lado femenino y decidí comprar cuatro botellas de estas: 




La verdad saben muy ricas , obviamente traen alcohol(si no no las hubiera comprado), pero me estoy pasando una velada deliciosa a pesar de que es lunes, pero yo no tengo problema alguno con eso.

Al rato voy a poner música  A doc y voy a interpretar la escena del silencio de los inocentes, cuando el guey malvado se esconde la pipí entre las nalgas, sera glorioso!!!...